AMAR Y SER AMADO

AMAR Y SER AMADO

Unknown

Amar es opción subordinada a la voluntad de cada cual, pero ser amado está a merced de conformidades externas, no siempre dispuestas a complacer el amor, haciendo posible la fusión de agente y paciente.

Quien ama pierde su identidad al fusionarse con la persona amada, pero ésta puede ser querida manteniendo su independencia sin mácula ni contaminación, porque la indiferencia protege su dolor del contagioso amor.

La persona amada es el pretexto que pone el amor sobre la mesa para hacerse visible en la vida de quien ama, pero no justifica el fracaso del olvido prematuro que no da tiempo a guardar las conmociones del amor en su espíritu.

El ser amado teme la caducidad del amor, se niega al abandono y desecha la soledad, pero sabe que todo ello es posible si un golpe inesperado de la sangre conmueve los cimientos de la inseguridad a que conduce el riesgo de amar.

Amar es dulce costumbre que retrocede espantada por la indiferencia de corazones pedregosos, mientras multiplica en los desamparados la esperanza de ser amados a golpes sistólicos fraternales y diastólicos solidarios.

Ser amado ilumina, vivifica, alienta, consuela y acompaña de paz las acciones amorosas, pero amar excede en generosidad, desborda benignidad, sobresale en benevolencia y complace a quien otorga amorosidad.

Si amar nunca hiere porque nada espera, ser amado deja en el alma cicatrices cuando la luz de amor se extingue en la vida del amado y la oscuridad deja a la intemperie recuerdos de una felicidad que olvidó su paradero.

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