Navegando por
Etiqueta: gobierno

ENTIENDO PERO NO COMPRENDO

ENTIENDO PERO NO COMPRENDO

543views

Entiendo lo que sucede, es decir, tengo ideas claras sobre la situación de crisis que padecemos, pero no comprendo la falta de respuesta ciudadana a lo que está ocurriendo, ni acepto la incompetencia de los políticos para dar con la solución.

Parece claro que todos somos responsables de la recesión que nos aplasta, pero no todos  en el mismo grado. Y resulta curioso que los más culpables de ello, sean los únicos beneficiarios del problema.

Digo esto porque los ciudadanos que han vivido por encima de sus posibilidades, ahora están pagando con desahucios los excesos cometidos. Los empresarios están pagando sus excesos con el cierre de empresas y la ruina personal. Pero, ¡ay amigos, los bancos! Ellos que se pasaron cuatro pueblos en tiempos de bonanza propiciando la catástrofe, están recibiendo millones de nuestros euros para seguir especulando con la desgracia que nos aflige, amenazando con la muerte si falla el sistema financiero. Ya, ya.

Si el origen de todo está en la deuda pública fruto del despilfarro y la corrupción, ¿por que ningún político ha sido condenado a cadena perpetua?. Es decir, que el Estado, las Autonomías y Ayuntamientos han tenido que pedir dinero anticipado a las entidades bancarias, para ofrecer servicios públicos megalomaniáticos, imposibles de pagar con la recaudación de impuestos, pero aquí no ha pasado nada.

Lo grave es que el dinero que ahora se está está pidiendo no es para nuevas inversiones, sino para amortizar la deuda ya contraída, lo cual significa que estamos pasando el “marrón” a nuestros jóvenes, que sin tener culpa alguna deberán pagar nuestra deuda, hipotecando su futuro.

Así las cosas, resulta que el Gobierno emite deuda, – es decir, pide euros -, al tiempo que rescata los bancos dándoles nuestro dinero, para que ellos se lo guarden y especulen en los mercados financieros, multiplicando el patrimonio de sus gestores y negándose a dar créditos que dinamicen la economía nacional. Bien por los chicos.

Por otro lado, las mismas entidades reciben también dinero nuestro a través del Banco Central Europeo al 1 % de interés, y lo utilizan para comprar deuda pública al 5 %, con un beneficio limpio y garantizado de cuatro puntos, porque si hay algún problema ahí está el fondo de rescate que también hemos puesto entre todos. Tiene gracia.

Parece ser que la solución pasaría por la nacionalización bancaria y que el Estado controlara el poder económico, pero sucede al revés: es el mundo financiero quien da instrucciones al gobierno, atándolo de pies y manos mientras a nosotros nos encadena en una galera que se hunde irremediablemente con nosotros en la bodega.

Comprenderán ustedes que llegando al final siga entendiendo todo, sin comprender nada, y me suba al carro de combate de mi amigo Ángel para tomar juntos la Bastilla.

DEPREDADORES

DEPREDADORES

El problema de Bankia, cuya versión real de los hechos sólo es conocida por los responsables de la quiebra y sus amigos de Génova, lo ha resuelto el Gobierno con una nacionalización de tres al cuarto, para maquillar las formas y tranquilizar al pueblo, que rechaza la explicación oficial, porque conoce bien la causa del fiasco.

Tranquilos, por tanto, que en este descalabro financiero todo está desatado y bien desatado, a diferencia de lo sucedido con la crisis general, en la que nadie sabe dónde está el dinero que se ha esfumado por arte de magia negra.

En Bankia tenemos claro el mangui, aunque tanta claridad irrite a los millones de indignados con pedigrí y sin él, que marchan abatidos con la pesadumbre bajo el brazo por la calle de Alcalá, declarando la insumisión a las corbatas.

Echando unas cuentas que han fundido las calculadoras, llegamos a la conclusión de que un grupo de ocho depredadores, – como muestra de otros cientos -, se han llevado “legalmente” en la mochila los 10 millones de euros que necesitamos  para sanidad y educación. Digo legal, porque ahora se mete la mano en la caja de forma autorizada y pública, sin que nadie pierda la vida en el intento.

Sí, verán, este ramillete ejemplar. El señor Blesa se llevó 1.800.000 euros  de la gallina de los huevos de oro, en concepto de indemnización. Olivas, expresidente de Bancaja y dimitido de todos los cargos en Bankia, recibe 800.000 de euros anuales por dirigir una Caja inexistente. El señor Amat se llevó 6.000.000 de indemnización al abandonar la entidad. Fernández, de la CEOE, cobra 263.000 euros anuales; Ponga, 326.000; al igual que otros quince altos cargos de Bankia afiliados al Partido Popular.

Afortunadamente, no hay ciudadanos de izquierda en el Consejo de Administración, pero asiste a las reuniones un tal Virgilio Zapatero que lleva una rosa en la solapa junto al bolsillo de la chaqueta donde mete los 339.000 euros que se lleva, y un tal Moral con el carnet de Izquierda Unida en la boca que mete en la bolsa 455.000 euros. Y el sindicalisto ugetista Martínez que se conforma el pobrecito con  186.000 euros simplemente.

Y que nadie pierda los nervios con el reparto porque habrá recompensa para todos los que faltan, pues aún le queda a Bankia  dinero para “rato”.

INSUMISIÓN

INSUMISIÓN

El sometimiento de unas personas a la voluntad de otras es un acto de acatamiento y subordinación que sólo encuentra respuesta en la insumisión, cuando el abuso de poder excede los límites fijados por las leyes, el respeto al ciudadano, la justicia social y el sentido común.

Patxi López ha optado por la insumisión civilizada que marca el Estado de Derecho, recurriendo al Tribunal Constitucional para expresar su rebeldía a la injerencia del Gobierno central en la autogestión autonómica, argumentando que las decisiones del Ejecutivo en materia de sanidad y educación, rompen el principio de igualdad y universalidad.

Actitud que corresponde a lo políticamente correcto, sin que ello menoscabe el espíritu insurrecto que la inspira, pues su levantamiento contra el Gobierno es consecuencia directa de las quejas ciudadanas que llegan hasta su mesa de despacho, gritando ¡basta ya! a la limadura que terminará haciéndonos virutas y llevando irremediablemente a los más desfavorecidos a una insumisión menos razonable que la del lendakari.

Sublevación que está al alcance de los que ya no tienen nada que perder porque lo han perdido todo salvo la vida, y no están dispuestos a dejarla abandonada a la puerta de un hospital. Insumisión activa de quienes llegan al final del sueldo sin acabar el mes, negándose a pagar las cuotas impuestas por aquellos a los que les sobra sueldo al final del mes.

A nadie extrañaría el bloqueo de autopistas y la silicona en las cerraduras de los centros educativos públicos. No cabe sorpresa en los hospitales si quienes no pueden pagar estancia, sillón y comida toman los centros sanitarios como los revolucionarios tomaron la Bastilla. Es normal que los enfermos crónicos con salario de subsistencia se nieguen a pagar las medicinas. Parece razonable que los afectados por la ley de dependencia bloqueen la entrada en la Moncloa con las sillas de ruedas. Y no sería extraño que los desvalidos hagan valer lo que valen valiéndose de su valor.

LOBBYCRACIA

LOBBYCRACIA

Comienzan las manifestaciones ciudadanas contra los recortes impuestos por Bruselas, es decir, por ladinos lobbyes económicos que nos gobiernan, aunque los políticos se crean que son ellos quienes toman las decisiones y los ingenuos votantes los que rigen las democracias occidentales.

En estos tiempos donde está de moda el puenting, tracking y rafting, se impone sobre todos nosotros el lobbying, o sea, la actividad de personas que obligan a los poderes ejecutivos y legislativos a tomar decisiones a favor de sus intereses.

Aunque hay lobbyes de todos los colores, como pueden ser los armamentístisticos, ecológicos y sindicales, quiero referirme al grupo de presión que más nos presiona y ajusta el cinturón, aunque nos lo disfracen de escenarios democráticos y sean los consejos de Gobierno portavoces de las decisiones tomadas en los consejos financieros de administración.

Cabildeo que todo el mundo conoce, sufre y tolera, sin que nadie haga por evitarlo, ya que muchos de quienes podrían hacerlo forman parte de tan macabro juego, al ser accionistas de los trusts empresariales que empujan gobiernos y parlamentos en la dirección que les beneficia, como es el caso del felón italiano.

Se ha extendido la lobbycracia como una mancha de aceite por todos los países, haciéndonos creer que vivimos en democracia, cuando la realidad es bien distinta, pues los grupos económicos influyen de manera terminante en los policy makers de Bruselas con fuerza desmedida.

Y si las cosas no van a su favor con vaselina en oscuras mesas de negociación, no tienen escrúpulos para acudir al persuasivo lubricante de corromper a los ministros, jueces o diputados que se venden por un simple plato de lentejas, con piedras que destrozan nuestra dentadura para impedirnos morderles.

Originariamente, los cabilderos esperaban durante horas a los políticos en la puerta del Parlamento para influir en su voto, pero hoy van directamente al grano y se sientan directamente en los consejos de ministros y parlamentos a dictar resoluciones, imponer decisiones y extender su voluntad más alla de de lo permitido por la democracia que utilizan como felpudo.

Nos han puesto a los ciudadanos en su punto de mira y no dejan de disparar recortes contra nosotros, obligándonos a salir a la calle tratando de evitar una muerte segura, para  expulsarlos del territorio que nos pertenece.

RECORTES

RECORTES

Por fin se abrió el melón de los presupuestos, que ha resultado ser más patatero de lo esperado. Incomible, vamos. Veneno, para entendernos. Es decir, para echarlo directamente a la basura si esto fuera posible, pero no es así porque millones de ciudadanos decidieron que fuera de otra manera.

Varias semanas esperando que los Presupuestos Generales del Estado vieran la luz y ahora resulta que no podemos encender las bombillas porque el aumento de la tarifa eléctrica nos impide dar al interruptor, y la subida de combustible para los vehículos de motor nos obliga a dejar el coche en el paro, junto a los cinco millones de ciudadanos laboralmente inválidos.

Pero no todo es malo. El bondadoso Gobierno que ha dejado sin prestación a los pobres  “dependientes”, les ofrece la posibilidad de ser atendidos en las iglesias donde habrá luz, agua, calefacción y trabajo, ya que el porcentaje de recortes no llega al 0 % en la asignación de cantidades a la Institución eclesial.

Unos por otra, para compensar. Pero tengo la convicción que quienes no pueden valerse por sí mismos habrían preferido mantener la prestación en vez de mendigar a las puertas de los templos. Estimo que una organización millonaria en efectivos bancarios, bienes inmuebles, obras de arte, patrimonio institucional y millones de fieles dispuestos a ayudarla, podría evitarle a los “dependientes” el bochorno de extender la mano, dándoles la parte que les corresponde.

En cambio, a los parados y desprotegidos les queda el consuelo de saber que con el dinero recaudado por la amnistía fiscal a las grandes fortunas, podrán seguir admirando, respetando y venerando a quienes viven de sus lágrimas y del sudor frío de quienes estúpidamente les admiran, respeta y veneran, sin tener siquiera ocasión de envidiarles porque les han cerrado el futuro.

CLEPTOCRACIA

CLEPTOCRACIA

396views

La cleptocracia es el dominio de los ladrones en un país gobernado por la indolencia de políticos que se benefician de las migajas que dejan caer de la mesa quienes ocupan lugares preferentes en el banquete social.

La cleptocracia institucionaliza la corrupción financiera, formaliza el nepotismo en todos los escalones de gobierno y promueve el clientelismo político comerciando con la voluntad de algunos ciudadanos a cambio de unas cucharadas de lentejas.

La cleptocracia se articula sobre la gravación impositiva a los indefensos ciudadanos, fomentando el incremento irregular de patrimonio de las grandes fortunas, el lavado de dinero negro y el encubrimiento de riquezas en paraísos fiscales.

La cleptocracia nace, crece y se desarrolla en oscuras autocracias, embaucadoras plutocracias, incompetentes dedocracias,  y engañosas democracias que ocultan peligrosas dictocracias, donde se juega al engaño colectivo con grandes palabras que entontecen aún más a los idiotas.

La cleptocracia se mantiene en países colonizados por sarteneros de la economía que fríen en denso aceite especulativo la resignación de quienes no tienen ni un huevo que freír, con ayuda de periocistas, apoyo de capelos y complicidad de politiqueros.

¿Conocéis algún régimen cleptocrático que subordine la acción de gobierno a los cleptócratas a costa del sudor ajeno, utilizando el dinero de contribuyentes, la sangre de los parados y la indiferencia de los pesebreros?

A PARTIR DE HOY….

A PARTIR DE HOY….

La salida de humo blanco por la chimenea virtual de la Moncloa, anunció en vísperas de Navidad que teníamos nuevo Gobierno. Es decir, que un grupo de ciudadanos abnegados, pertenecientes al Partido Popular, habían decidido sacrificar sus vidas  por nosotros, entregándose a la causa del bien común, sin ambiciones particulares de poder, dinero o influencia.

Gracias, pues, a ellos, por ello, en medio de la emoción conmovida en este primer día de del año, cuando estamos en el «inicio del inicio» de la que se nos viene encima, porque este año nuevo presagia verdaderamente vida nueva para todos.

Si me prometen ustedes que no van a reírse, les cuento lo que siento y pienso, sabiendo de antemano que sus carcajadas van a oírse en la cima del Aconcagua. Pero, créanme, a partir de hoy, los ciudadanos cataremos las decisiones del nuevo gobierno con la emoción que se cata un vino de apariencia noble y elevada acidez volátil, conscientes que un grupo de generosos y esforzados vecinos, van a dejarse la piel en el empeño, para que todos vivamos mejor.

A partir de hoy, la política servicial recuperará el espacio que lleva perdido desde hace veinte siglos, ocupando la vocación política el lugar correspondiente.

A partir de hoy, la honestidad del gobierno nos redimirá de los estercoleros, y el sabor aterciopelado de la honradez nos hará olvidar la corrupción.

A partir de hoy, paladearemos la templanza de los regidores, su respetuosa compostura y la prudencia de sus juicios.

A partir de hoy, disfrutaremos con su neutralidad de criterio, la neutralidad de sus juicios y la sinceridad de sus discursos.

A partir de hoy, la vocación de servicio al Estado brillará por encima de los intereses partidistas del grupo gobernante.

A partir de hoy, el sectarismo institucional será una página olvidada en las conciencias, en los libros de texto y en las hemerotecas.

A partir de hoy la educación pública ocupará el lugar que le corresponde y se hará realidad el acceso gratuito a la cultura de los ciudadanos menos favorecidos.

A partir de hoy, los multimillonarios tendrán que ajustarse los machos, porque ha llegado el tío Mariano con especiales impuestos para ellos.

A partir de hoy, los especuladores de la miseria, usureros bancarios y políticos corruptos, comenzarán a desfilar por los tribunales de la justicia.

A partir de hoy, la libertad de opinión y la información veraz será el norte y guía de los medios de comunicación tutelados por el gobierno.

A partir de hoy, seremos tratados como ciudadanos adultos, siendo informados  de las razones que impulsan las decisiones del Gobierno.

A partir de hoy, el acceso a cargos institucionales, se hará en función del mérito y capacidad de los aspirantes, sin necesidad de llevar en la boca el carnet del partido.

A partir de hoy, la sanidad pública contará con los recursos humanos y materiales necesarios para velar con garantías por nuestra salud.

A partir de hoy, los brotes verdes se transformarán el bosque floridos donde todos cantaremos a corro y a la crisis le daremos con los huesos en las narices.

A partir de hoy, el crecimiento será imparable, no habrá paro, los pájaros cantarán, las nubes se levantarán y caerán chaparrones de azúcar y turrones.

A partir de hoy, la ética pública ocupará finalmente el lugar que le corresponde y los impostores huirán despavoridos con el rabo entre las piernas.

A partir de hoy pasarán a galeras los trileros políticos, embaucadores de pacotilla y charlatanes de la nada, que intentan confundir nuestro sentido común.

A partir de hoy, brindaremos con los ministros que pretenden contagiarnos un estado de delirio caracterizado por soñar con la posible ilusión de vivir en un país próspero, esforzado, solidario, culto y honrado, que algunos deslenguados se empeñan en condenar a cadena perpetua.

¡Ay, a partir de hoy, amigos!, a partir de hoy….

(Estoy oyendo carcajadas, y les recuerdo que están incumplido su promesa)