DESPEDIDAS
Sabemos que algunos libros no volveremos a leerlos; que ciertas miradas nunca las recobraremos; que los desfiladeros de la piel olvidarán las caricias; que la soledad acompañará las vigilias del insomnio; que habrá encrucijadas donde perdamos lo inalcanzable; y ecos de voces perdidas vibrando en la memoria; pero esto no debe malograr la esperanza en redentores guiños inesperados de la vida.