JUNTOS CON EL MAESTRO
El Centro de Estudios Salmantinos, la Asociación Amigos de Unamuno y la universitaria Casa Museo Unamuno, unieron ayer sus intenciones en el proyecto común de romper fronteras para hacer cultura común en la capital cultural europea, homenajeando a Unamuno en el ochenta aniversario de su muerte.
Más allá de todo sectarismo cultural, la Casa Museo de Unamuno fue testigo de las caminatas de don Miguel por la sierra salmantina y su deambular por las empedradas calles de Sierra de Francia, La Alberca, Béjar y Las Hurdes, llevados de la mano por la palabra de Miguel Elías, José Luis Puerto, Pablo Unamuno y quien esto describe para los lectores.
Unidos en fraternal velada, asistentes y ponentes, bajo el gran retrato de Unamuno que el artista mogarreño Florencio Maíllo donará en unas semanas a los vecinos de La Alberca para que luzca en una fachada de la localidad, fundimos vocaciones unamunianas para hacer cálida una fría tarde invernal en la Casa Rectoral que puso en nuestras manos Ana Chaguaceda, con la generosidad que siempre ofrece a quienes franquean la mansión que dirige.
Caminar cavilando, trenzando versos por veredas serranas con anécdotas del maestro y quejas centenarias doloridas, en intento baldío por liberar del olvido y la pobreza al pueblo jurdano, en tiempos se sequía cultural, abandono social y desprecio institucional, irredimible con publicitarias visitas reales disfrazadas de preocupaciones palaciegas.