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Mes: enero 2012

PARAÍSOS FISCALES

PARAÍSOS FISCALES

Nada sabemos del paraíso celestial donde al parecer algunos pasarán la eternidad por haber sido, – o aparentado ser -, buenos en la vida. Poco sabemos la gran mayoría de terrícolas de bellos lugares paradisíacos repartidos por el planeta. Del paraíso terrenal simplemente sabemos lo que Dios Padre inspiró a los escribas del Antiguo Testamento, para que supiéramos las andanzas de nuestros padres primigenios en el jardín de las delicias. Y todo el que quiera puede leer los paraísos artificiales de Baudelaire compartiendo su experiencia con las drogas.

Pero sólo unos cuantos privilegiados pueden disfrutar de países, islas, territorios o ciudades donde bancos, empresas y millonarios, pueden llevar allí sus fortunas sin pagar un duro por ello y con una opacidad infranqueable. ¡Bien!

En estos fraudulentos espacios insolidarios hay asentadas quince sucursales de bancos españoles por las que se pasean famosos sinvergüenzas de guante blanco que ensucian su boca hablando al pueblo de honradez y sacrificio.

Se calcula que son 16 billones, – ¡billones! – de dólares, el dinero que circula por las Islas Caimán, Londres, Gibraltar, Andorra, Bahamas, Belice, Islas Vírgenes, Maldivas, Mauricio, Montecarlo, Liechtestein, San Marino, Vaticano, Seychelles y cien lugares más repartidos por el mundo, llevado a sus cajas secretas por usureros y explotadores del sudor ajeno.

Forma de limpia de blanquear dinero transfiriéndolo a través de Internet y de lavar dinero sucio entregándolo personalmente en las ventanillas, sin necesidad de intercambiar una sola palabra con el empleado de turno, encargado de recoger las bolsas.

Si el dinero evadido permaneciera en los países de origen, éstos recaudarían  los 200.000 millones de dólares que permitirían erradicar el hambre en el mundo. Y si la Hacienda española recuperara los 80.000 millones de euros anuales originados por fraude fiscal, no habría crisis a la vista.

¿Qué hacer, pues? Ya lo he dicho muchas y no voy a repetirlo.

¿CIRCUNLOQUIOS O CINISMO?

¿CIRCUNLOQUIOS O CINISMO?

Sorprende la capacidad de encaje y tolerancia de los españoles con el grupo político de su preferencia, por grandes que sean los disparates que cometan sus elegidos. Poco parece importar a los respetables votantes populares los exagerados abusos que estamos viendo, el irrespetuoso silencio del presidente, los desmedidos engaños y el descarado cinismo de quienes utilizan sus votos para llenar la copa de ambiciones personales, aprovechando que los socialistas no dejan de mirarse al espejo.

Apenas unas semanas llevan los populares en el gobierno y nadie parece inmutarse con nada, otorgándoles patente de corso para hacer cuanto les venga en gana, con el argumento de que no es posible hacerlo peor que sus antecesores. Pero están equivocados quienes así piensan porque con insultos al sentido común de los ciudadanos y mofándose del personal, llegamos cerca.

Agravian las justificaciones esgrimidas para subir impuestos porque sabían de sobra como estaba el patio cuando negaban el aumento de los mismos. Ofende la risa del ministro de Hacienda en la COPE cuando se le preguntó por los impuestos y su gangosa ironía al dirigirse a las miembras de la Cámara.

Pero más denigran nuestro buen sentido los juegos de palabras utilizados por los populares para no decir claramente lo que quieren decir, diciendo lo que nadie quiere que digan por muy necesario que sea decirlo. Esto, que en principio, pudiera ser un eufemismo, no lo es porque no son expresiones duras ni malsonantes. Son, aparentemente, circunloquios ya que sus expresiones podrían decirse más brevemente.

La situación me ha obligado a revisar, ampliar y corregir el diccionario de cinismo político cambiando antiguas expresiones por modernos términos populares.

Así, congelación salarial pasará a llamarse mejora de la competitividad.

Pobreza: bajo poder adquisitivo.

Subida de impuestos: Recargo temporal de solidaridad.

Recesión: Tasa negativa de crecimiento económico global.

Empresarios: Emprendedores.

Recortes: Ajustes económicos equitativos.

Rebajas fiscales a millonarios: Ayudas a los ahorradores.

Empleo precario: mini jobs.

Tijeretazo: Ley de Estabilidad Presupuestaria.

Abaratamiento del despido:  Flexibilización alternativa del mercado laboral.

Copago: Ticket moderador “convergente”.

Y, por último: regalar nuestro dinero a Cajas de Ahorros y bancos mal gestionados, para  enriquecimiento millonario para sus gestores, se dirá a partir de ahora: facilitar la gestión del patrimonio especulativo dañado en las usureras e insolidarias entidades financieras.

SALVADORES DEL SALVADOR

SALVADORES DEL SALVADOR

Igual que los creyentes tienen sus dioses salvadores en las religiones que profesan, los españoles contamos con un salvador que nos salva de caer en nuevas tentaciones guerreras con su arbitraje, porque los españoles tenemos la rara afición a pelearnos entre nosotros a la primera de cambio, como atestigua nuestra pródiga historia en salvajes contiendas civiles.

Gracias a nuestro salvador – no a la madurez del pueblo, claro – llevamos años limitándonos a intercambiar bofetadas dialécticas, en el marco de una democracia formal patrocinada por él, bastante alejada de la reclamada por sus vasallos.

Nuestro salvador modera los ímpetus primarios heredados de pasados siglos, siendo para nosotros ejemplo de honestidad personal, crisol donde se funden las más altas virtudes, espejo de bondad, paradigma de sacrificio por el pueblo y arquetipo de austeridad.

Pero nuestro salvador puede salvarnos gracias a los salvadores que a él le han salvado. Han sido los errores de sus leales militares, la ambición desmedida de su yerno, el silencio mediático de los publicistas y la discreción leal de los amigos, quienes han facilitado que el salvador continúe salvándonos, aunque no sepamos muy bien de qué nos salva.

Cuando la popularidad del salvador comenzó a desplomarse entre los ciudadanos, unos militarotes amigos – que no militares – consiguieron alzarle a lo más alto pegando tiros en el Congreso a las moscas cojoneras que había en la sala nacional, perforando el techo de nuestras esperanzas en una próxima república.

Cuando los rumores sobre sus dudosas andanzas financieras y desleales escarceos amorosos, comenzaron a circular por los mentideros de todas las ciudades del reino, los medios de comunicación pusieron sordina en sus páginas y guardaron las trompetas.

Cuando más transparencia exigía la democracia sobre las cuentas y andanzas del salvador, sus íntimos Sabino y Colón se llevaron los secretos a la tumba; Conde guarda silencio en “La Salceda” toledana; De la Rosa no abre la boca; los servidores de palacio afirman que su boca no le pertenece y la gran profesional que vive con él no deja de sonreír.

Finalmente, ahora, cuando más se cuestionaba el futuro del salvador con una nota de 4,8 puntos en la encuesta del CIS, su yerno se dedica a poner bombas especulativas cebadas de corrupción en los cimientos de La Zarzuela, consiguiendo que los ciudadanos hayan aumentado la calificación al monarca hasta el Notable en la encuesta publicada por El Mundo el pasado día 2.

CRISIS SOBRE RUEDAS

CRISIS SOBRE RUEDAS

Por si todavía quedaba algún ingenuo españolito perdido entre las sombras más oscuras de los rincones del reino, sin enterarse de lo que sucede ni considerarse víctima inocente de la crisis, envío esta noticia a su retiro para  demostrarle lo contrario.

Salvo los habitantes de inopia, todo hijo de vecino sabe que están sufriendo la crisis quienes no la provocaron, mientras los responsables de la misma toman piña colada bajo una palmera, en hermosas playas de las Seychelles.

No son las palabras más o menos acertadas del párrafo anterior quienes hablan por mí, sino la realidad de los hechos constatados por las agencias de viajes y por las ventas de vehículos a motor, quienes descubren la realidad de la vida a los inmóviles papanatas.

El dato es contundente:  la venta de coches correspondientes a las gamas media y baja, es decir, los que compran la mayoría de ciudadanos, ha disminuido un 17,7 % durante el año 2011 que hemos abandonado en la cima, mientras vamos descendiendo a la sima que nos espera en diciembre de 2012.

En cambio, la venta de coches de lujo, es decir, aquellos que compran banqueros, herederos, especuladores y millonarios, ha subido durante el mismo año un 83,1 %, sin que el nuevo gobierno pestañeara, ni la oposición haya movido un dedo en los volantes, paralizada como está políticamente, ocupando el tiempo en cocinar amargos platos para sus militantes y amigos, con añejos condimentos ya caducados hace tiempo.

El resumen es que la crisis va sobre ruedas para los especuladores del sudor ajeno, los beneficiarios de las huchas ciudadanas y los corruptos inmunes a los juzgados. Pero lleva rodando por el suelo a millones de parados con mendrugos de pan en los bolsillos; a emigrantes sin posibilidad de redención; y a enfermos en listas de espera hacia la muerte.

ESPIRAL EN EL NAUFRAGIO

ESPIRAL EN EL NAUFRAGIO

Los aficionados a las matemáticas saben que la espiral geométrica es una línea curva que gira alrededor de un punto y se aleja cada vez más de él. Pero como ciudadanos sabemos que esa línea tiene poco que ver con la espiral de dolor y frustración que están padeciendo los socialistas desde el día que se abrieron las urnas.

A partir de ahí, los jardineros de la rosa no se conforman con cabrearse entre ellos, sino que llevan semanas desorientando al personal con sus idas, venidas, silencios y esperas, llevándose en el trasiego a los supervivientes del cataclismo hasta el redil de las tinieblas políticas, donde sólo se escucha llanto y crujir de dientes.

No es posible la vida política sin crítica democratica a la gestión del gobierno, por eso necesitamos con urgencia un antídoto contra el aturdimiento de la futura oposición que en su irrefrenable huida hacia adelante se aleja en espiral de la realidad, envuelto en la confusión ideológica.

De momento tenemos suerte porque las palabras no han perdido para nosotros su significado, aunque algunas opiniones intenten confundirnos aromatizando la rosa con pestilentes maniobras, sin solución posible.

Se mire por donde se mire, no hay disolvente capaz de licuar tanta desilusión en los votantes socialistas a causa del emplaste que están preparando en Ferraz, donde la tensión aumenta de forma tan incontrolada que sus detritos ya nos están salpicando a todos, hermanando la espiral de tensión interna con la de frustración externa.

Ante tal futuro sólo cabe pedir un máster en sentido común para los sacerdotes que ofician esta ceremonia de la confusión. Sí, porque no hay tratamiento para el autismo social que padecen algunos dirigentes, caracterizado por un ensimismamiento y desinterés total por lo que sucede extramuros del nº 70 de Ferraz,  donde tiene su injerto la rosa que está desgastando la ilusión de sus leales simpatizantes.

La falta de empatía con el pueblo, unida a la frustración por la derrota, produce en algunos cabecillas tensión en los músculos faciales, aceleración de latidos y desencajamiento de maníbulas como preludio de los exabruptos que proyectan contra las paredes domésticas de quienes no están de acuerdo con ellos. Las consecuencias de tal sofoco son el atragantamiento, las náuseas y los vómitos provocados por quienes se pasan el día echando excrementos y culpas en platos ajenos, sin darse cuenta que son ellos mismos los cocineros del fracaso.

Las ideas obsesivas que acumulan ciertos líderes aumentan el desengaño, construyendo el enfado sobre el enfado, porque cada pensamiento negativo excita aún más el precedente, cerrando las puertas a la razón y generando un irrefrenable deseo de acabar con los disidentes. No perciben que ese alejamiento en espiral de la realidad los hunde poco a poco en el pozo cada vez más profundo de la frustración.

La única solución es huir a campo abierto para ver desde allí la realidad del bosque en el que se encuentran perdidos. Pero no pueden porque están presos de una obcecación que les atenaza. En su caso no cabe la solución del anuncio televisivo, pues no hace bien al país ver a la oposición por el suelo para calmar la ambición incontrolada de sus líderes. Espiral que va transformándose en círculo vicioso, incapacitándoles para romper el eslabón que les devuelva al mundo real en que habitan la mayoría de los mortales.

Sólo un curso intensivo de inteligencia social puede sacar del abismo a la nomenklatura socialista que ha ido del fracaso electoral al sufrimiento por el camino más corto, simplemente por ser cejijuntos emocionales, dispuestos a sacrificarlo todo al precio que sea, para evitar pagarse de su bolsillo los billetes de regreso a Cantabria, Barcelona y Sevilla.

PASO A LA JUVENTUD

PASO A LA JUVENTUD

A diferencia de los alimentos rancios que con el tiempo terminan por autodestruirse, los políticos añejos son pegajosos y no se descomponen por sí solos. Esta inmortalidad obliga a empujarlos por el barranco del olvido hasta despeñarlos políticamente. Algo que será fácil para los diez millones de ciudadanos que están empeñados en conseguirlo, aunque ellos no les hagan caso, ….de momento.

Quienes tienen vocación de futuro no pueden aceptar el portazo que se da a los jóvenes en los partidos. Quienes piden renovación se niegan a seguir viendo los mismos rostros en los carteles. Quienes han apostado por un cambio real rechazan ver a los jóvenes colgando sus ilusiones al sur de las pancartas que sostienen en las manifestaciones. Quienes han dejado jirones de piel bregando por la justicia social no pueden tolerar el patrimonialismo político de líderes vitalicios que engañan a los jóvenes con promesas que nunca llegan acumplirse. Quienes han luchado por la igualdad de oportunidades tras sufrir muchas desigualdades, están dispuestos a destaponar los diques que los viejos ponen a la esperanza y fortaleza de quienes pueden hacer realidad el sueño de alcanzar una sociedad más justa, más libre, más solidaria y más democrática.

No fueron los jóvenes quienes marcharon detrás de Tierno Galván, García Calvo y Aranguren por las avenidas de la Ciudad Universitaria en 1965, sino que los profesores se pusieron delante de ellos cuando ya llevaban varios días en marcha. Fueron los jóvenes quienes hicieron posible el mayo francés del 68, el fin de la guerra del Vietnam con sus protestas, la consolidación de los derechos civiles con su movimiento, la primera crisis del comunismo con la primavera de Praga, la revolución cultural china con Mao a la cabeza y la recreación de los espacios de cultura dando su vida en la plaza de Tlatelolco.

En estos momentos necesitamos a los jóvenes más que nunca, porque sólo su temeridad, arrojo, generosidad y valentía harán temblar a banqueros, especuladores, corruptos y politiqueros, sostenidos con la prudencia, el miedo, los intereses y la cobardía de políticos rancios, permitiendo que se mantengan donde están y que continúen en su trono riéndose de la mayoría silenciosa por los siglos de los siglos, amén.

RESACA NAVIDEÑA

RESACA NAVIDEÑA

Los excesos navideños nos llevan irremediablemente a una resaca cíclica, unida al arrepentimiento, propósito de enmienda y promesa de que en años venideros no caeremos en las mismas trampas ni cometeremos los mismos errores, sabiendo que repetiremos.

Es el cuento de cada año y seguirá siéndolo mientras los humanos continuemos marchando por la vida con nuestros pecados sociales a la espalda, la mirada puesta en el vecino, el dinero prestado en el bolsillo, la ingenuidad a flor de piel y los pies fuera de la cuadrícula que a cada cual corresponde.

Tras deambular unos días por ficticios senderos perfumados, ha llegado la hora de coger el piolet, calzarse los crampones y comenzar a subir la helada pared vertical de 2012 metros de altura que tenemos delante, en unas condiciones físicas y mentales inadecuadas para el esfuerzo que se avecina.

Con exceso de masa corporal por la ingesta de cantidades excesivas de alimentos, embaucados por villancicos y luces multicolores, con las reservas del monedero agotadas por el irracional consumo, decepcionados por ficticias solidaridades, contaminadas las venas con sangre de cepas catalanas y extremeñas y desvalijadas las grandes superficies, ha llegado la resaca al despertarnos del sueño.

Resaca navideña que se diferencia de la alcohólica en que no se pierde la memoria, sino todo lo contrario. No se tienen vómitos, pero aumentan las diarreas ante lo que se viene encima. Se dilatan los vasos sanguíneos, como preludio de una irritación inmediata. Aumenta considerablemente la sed de mayor justicia social por la deshidratación de sueldos y empleos. Se producen cefaleas revolucionarias por el aumento del paro, acompañadas de dolores abdominales por el hambre, grandes flatulencias y embotamiento del sistema nervioso que obnubila la razón, provocando oleadas de violencia contra los recaudadores.